Perla Escandón Tovar, Reportera de El País y escritora de muchas noticias de este periódico, denuncio en uno de sus artículos publicado el 22 de marzo del 2007, titulado (Piques ilegales, un juego mortal), la problemática que esto ha causado a la comunidad caleña y principalmente a los jóvenes, por la gran tasa de accidentes automovilísticos y la muerte de muchos pilotos que es causada en su mayoría por la combinación de exceso de velocidad y drogas.
Las competencias nocturnas clandestinas, ha causado muchos accidentes de tránsito por la combinación fatal de exceso de velocidad, peligro y licor. En el kilómetro 18 o en la vía a Yumbo una gran cantidad de carros más o menos 50 desafían la muerte. Se trata de pilotos que compiten a velocidades que alcanzan los 190 kilómetros por hora. La Policía Metropolitana de Cali dice que con frecuencia programan operativos de control, pero mientras no haya más apoyo del gobierno para la construcción de pistas o escenarios adecuados para esta esa actividad, siempre existirán los piques ilegales.
Durante los últimos años la policía ha aumentado los operativos de control en los sitios más usados para la práctica de piques ilegales, pero estos afirman que todo ese personal debería combatir la delincuencia y que el gobierno debería ayudar más con la creación de pistas para esta práctica lo cual sería una buena solución a esta problemática.
El artículo es muy claro y muestra que una manera de poder controlar esta problemática depende mucho del gobierno, porque muchos pilotos y policías argumentan que ellos buscan sitios por lo que no hay donde correr y esto ocasiona la práctica ilegal de los piques.
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